Aprendí a borrar el no se puede de mis memorias

Esta práctica ha dado a mi vida cambios importantes y concentro todo mi intento para que sea tan ligera que un día pueda flotar sobre mis propios recuerdos.

Lo que me ha dejado la práctica de la Tensegridad, aparte de Bienestar Físico y emocional, es la conclusión de varios de mis proyectos de trabajo que quizá en otros momentos de mi vida no hubiesen sido posibles debido a la falta de acceso a mi propia energía.

El hecho de saber que la energía se dispersa y que existen fuerzas internas y externas que de alguna forma sostienen lo que creemos que es el mundo y estas mismas las alimentamos con nuestra energía constantemente, te invita a limpiar ese almacén de emociones y creencias para que puedas poco a poco tener acceso directo a tu propia energía y usarla para ti por primera vez.

Yo aprendí a borrar el no se puede de mis memorias leyendo directamente los mensajes que la cosas y las situaciones nos dan y romper los candados de las suposiciones y los miedos que nos repetimos en el mundo automáticamente.

Mi trabajo es una canalización de mi alegría por eso me complace hacerlo. Ahora sé que todo se mueve y por lo tanto no vale la pena engancharse de nada.